jueves, 9 de agosto de 2012

Querido capullo :

El que me hace reír, por el que me paso todas las noches llorando. Ya va siendo hora de que madures y te des cuenta que necesitas a alguien que te quiera, que te apoye, que te entienda, que comprenda esos días de cambios. Sé que tu y yo tenemos muchas diferencias, soy consciente de ello. Me encantaría ayudarte, cumplir mi promesa. Pero he decidido olvidarme de ti, como aquel que decide deshacerse de un objeto viejo e inútil. Miles de promesas, imposible cumplirlas. Tranquilo, esta vez no va a volver pasar. "No hay mal que no dure cien años" Ni cuerpo que lo aguante... No te supe aprovechar en ese tiempo, al principio me culpaba, me hacía sentir una aunténtica mierda, ahora sin embargo no me arrepiento. Así que pondré un punto y final. Cómo puedes ver querido idiota ha pasado demasiado tiempo con el que me he hecho millones de preguntas tontas, sin respuesta, aunque he de recordarte que me debes una explicación. No es justo, bueno más bien no era justo. Hasta nunca gilipollas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario